viernes, 5 de marzo de 2010


1 pinchar las ampollas de mis pies con una aguja, y dejarles colgando un hilito negro que entre y que salga.

2 comprar zapatos cafés usados en la reparadora olvidada de la calle quillota

3 terminar el rollo y dejarlo reposando hasta que tenga dinero para revelarlo

4 empezar otro libro menos infiel que kundera y más largo y denso que el de la viera gallo

5 no abusar de los cubitos de avena para que no llegue el día en que me harten

6 reconocer que mis gustos y mis descubrimientos funcionan a un ritmo muy distinto al normal



lunes, 1 de marzo de 2010

ayer cambié mi cama de lugar y quedarme dormida me costó unas seis vueltas más que de costumbre; la luz entraba distinta por la ventana, no conocía el lado izquierdo del colchón, las canciones en el audífono no eran las de siempre, no recordaba cuantas hojas de cedrón le había puesto a mi té, y muchos perros ladraban como para cerrar el día con las pestañas.